Actualmente la Corrala la componen personas amigas que comparten valores y apuestan por una comunidad feminista, ecologista, igualitaria y no jerarquizada, con la intención de integrarse plenamente en el entramado social y vecinal de Rivas a través del intercambio cultural, lúdico y solidario.
Nuestro deseo es diseñar un proyecto, con viviendas en las que podamos continuar nuestras vidas, respetando intereses, preferencias y
creando hogar. Tendrán gran relevancia los espacios comunes en los que convivir, socializar y atender las necesidades que se planteen en cada momento vital, incluida la dependencia.
Estamos convencidas de la necesidad de realizar transformaciones profundas en la visión y tratamiento que la sociedad tiene hacia las personas mayores y reivindicamos el derecho a decidir, pensar y planificar nuestro futuro, porque a cualquier edad hay futuro y porque el respeto y la dignidad de las personas no la marcan la edad o las capacidades físicas sino la condición de seres humanos.
Es por eso, que tratamos de construir una comunidad para el cuidado, con la intención de mantener estos principios o derechos en todo momento de la vida, es decir, alojamientos con vocación de “viviendas para toda la vida”, estableciendo las estrategias necesarias para favorecer que cualquier persona pueda permanecer en casa incluso en situación de dependencia, siempre que así lo desee.